Transporte Internacional (TIR). Autónomos.

Una nueva oportunidad de negocio

El transporte internacional ha experimentado una gran expansión gracias a la demanda de nuestros productos en diferentes mercados comunitarios.

La libertad de circulación y mercancías dentro del EEE, ha hecho que el pequeño transportista se aventure a realizar rutas internacionales.

Grandes marcas de camiones como IVECO, VOLVO o SCANIA, proporcionan un servicio que da cobertura de reparación casi en cualquier lugar.

Estos grandes grupos, tienen talleres concertados por medio mundo, lo que ofrece, al transportista, sin duda, un plus de confianza.

Evidentemente, las ganancias por un transporte internacional son muy superiores a las que se obtienen cuando se realiza un transporte en España.

¿Realmente merece la pena?

Hacer una ruta fuera de nuestro país, implica un esfuerzo económico, un gran sacrificio personal y un desgaste que no todo el mundo soporta.

Desde el momento en que un transportista autónomo se sube al camión, corre la moneda. Los gastos se van sucediendo casi sin darnos cuenta.

Seguro de circulación, seguro de mercancía, gasoil, desgaste del vehículo, aparato de frío,  neumáticos, peajes…

Sin olvidar la avitualla personal, como las dietas o las noches de hotel en caso de necesidad.

Pero si los gastos en España ya son altos de por sí, los gastos fuera son mucho más elevados, tanto, que podemos llegar a tener graves problemas.

La salud siempre ha de ser lo primero

Dentro del Espacio Económico Europeo, tenemos garantizada la ASISTENCIA SANITARIA en los mismos términos que los nacionales del país.

Es importante llevar siempre la Tarjeta Sanitaria Europea.

La puedes conseguir gratuitamente en la página web del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.

Tan sólo tendrás que rellenar tus datos personales y el número de afiliación a la Seguridad Social.

El hecho de que nos atiendan de la misma forma que los nacionales del país donde estemos, no implica que el servicio sanitario sea gratuito.

Podemos encontrarnos con que tengamos que realizar algún tipo de copago, o bien asumir parte del coste de la atención sanitaria.

Si decides hacerte un Seguro de Salud Privado, te puedes encontrar con un problema parecido.

Quizás tengas que tomar a tu cargo en un primer momento la gestión del incidente, abonar las cantidades y luego solicitar el reembolso.

El reembolso puede ser del 100% de los gastos o un porcentaje menor, dependiendo de la compañía y el tipo de seguro.

Por todos es sabido que los costes sanitarios en el exterior suelen ser altos, de ahí que esta cuestión no sea baladí.

Las sumas aseguradas de las coberturas de tus pólizas

Hay que prestar especial atención a las sumas aseguradad contratadas para asistencia en viaje.

También es importante el ámbito geográfico aplicable en los siniestros de circulación, R.C. o mercancía.

No todo está cubierto…

En las condiciones particulares, o en su defecto, las condiciones generales o especiales, vienen establecidas las sumas aseguradas de cada partida.

Son las cantidades que, como máximo, asumirá la compañía de seguros.

Por ejemplo, la garantía de asistencia en viaje cubre:

– El arreglo in situ (en la carretera)

– Remolcaje del vehículo o su rescate

– Servicios inherentes a las personas, como taxis, noches de hotel, etc.

Sin embargo, presta atención a las sumas aseguradas porque, lo que puede ser más que suficiente en España, puede quedarse corto si viajamos fuera.

Al igual que ocurre con la atención sanitaria, los servicios de asistencia en el extranjero son caros.

Hay que contactar siempre con la compañía

Si necesitamos asistencia en viaje, es importante siempre contactar con nuestra cía para que ésta pueda mandar a su proveedor de servicios.

Las compañías tienen precios concertados con muchas de estas empresas, y por lo general, el precio es mucho más bajo que el que te cobrarán a tí.

Aunque algunas carreteras privadas tienen su propio servicio de grúas que te pasará la factura a ti.

Llamar a nuestra compañía tampoco nos garantiza la total cobertura. ya que, a veces, diversos factores puede disparar el precio del servicio.

Si los costes son mayores a la suma asegurada que tenemos contratada, te tocará pagar la demasía.

Si sufres un siniestro a causa de la nieve, en vez de una avería, todo se va a complicar exponencialmente.

Recuerda que la asistencia en viaje no mueve el semirremolque si está cargado de mercancía.

Además de llamar a la grúa, deberás dar parte a tu compañía para que manden a un perito que vea la mercancía.

Y el problema se hace cada vez más grande…

Nos encontramos en un país extranjero, con una burocracia que desconocemos, un idioma que quizás no hablamos o chapurreamos.

En un lugar completamente nuevo donde no sabemos de talleres, ni de empresas que puedan ayudarnos.

Debes saber que existen en España empresas que se dedican a rescate internacional de mercancías, pero el coste debes asumirlo inicialmente tú.

Y nos podemos encontrar con muchas situaciones dispares.

Puede ocurrir que la empresa de rescates envíe personal y grúas de gran tonelaje, pero que las autoridades hayan cerrado la carretera por nieve.

Quizás ocurra que no nos dejan cortar uno de los carriles en el momento que necesitamos para rescatar la mercancía o incluso el camión.

Cualquiera de estos supuestos suma costes.

Si nuestra marca no tiene talleres concertados por la zona, la grúa nos remolcará al taller que le indiquemos.

Un taller que quizás nos cobre una pasta por un arreglo que en España nos costaría la mitad.

Y quizás es peor si la grúa traslada nuestros vehículos a la base, pues, cobrarán por cada día que estén allí.

¿Es el transporte internacional realmente una opción para el transportista autónomo?

Pues como ocurre con todo, depende. Si sales por Europa y no tienes ningún problema, puede ser una buena opción de negocio.

Si sales por Europa y tienes una buena cobertura de talleres próximos a las rutas que haces, también puede ser interesante.

¿Haces transportes por Europa y tienes una empresa que te remolque los vehículos al taller de la Marca más cercano en nuestro país?

También puede ser buena idea.

¿Haces transporte internacional a la aventura con el convencimiento de que en caso de siniestro tu compañía te va a salvar los muebles?

Ten cuidado porque puedes ir a la ruína.

Nadie da duros por pesestas, y sinceramente, siempre vamos arañando el euro.

Si pagamos poco por nuestra póliza de seguros, no podemos pretender tener una cobertura premium.

Los años de experiencia nos dicen que el TIR para un transportista autónomo con uno o varios vehículos, no es una buena idea.

Grandes Grupos Logísticos

Los grupos logísticos con grandes flotas de vehículos y altos recursos económicos, pueden permitirse hacer transporte internacional.

Tienen camiones en plural repartidos por los principales mercados europeos…

Estos gigantes incluso cuentan con sus propias góndolas en caso de necesidad.

Disponen de conductores y tienen pólizas concretas de asistencia de amplia cobertura, además de contactos por toda Europa.