Las grandes compañías automovilísticas, están haciendo seguros para compensar la bajada de ventas, y la tremenda competencia que actualmente está experimentando el sector del automóvil.
Existen en el mercado una variedad tan grande de vehículos que, inevitablemente, están haciendo tambalearse a los grandes grupos afianzados quizás años atrás.
Y no sólo venden seguros, también los regalan dentro de la operación de compra del vehículo.
El sector del automóvil ofrece algunas posibilidades para las marcas y concesionarios.
Por un lado está el tema de la financiación. Si financias un vehículo con la financiera de la marca, tendrás acceso a algunas ventajas.
¿Qué ventajas?
Ventajas como una reducción importante a veces en el precio del coche, también tienes la posibilidad de hacer lo que llaman una “multiopción”.
Es decir, compras el vehículo financiando todo o parte del mismo, dando una entrada o sin darla durante un cierto número de años, pongamos de ejemplo tres años.
Cuando concluyen esos tres años, la marca te ofrece la posibilidad de pagar lo que te quede del coche, refinanciar nuevamente o entregarlo a la casa por el importe adeudado, eso sí, siempre que el vehículo cumpla con las condiciones, aunque siempre tendrás un capital garantizado.
De esta forma, las empresas del sector ganan dinero cuando sus clientes realizan estas operaciones, pero además los seguros son un caramelo muy jugoso que es inherente al vehículo y de cuya tarta, la automoción también pretende coger un trozo.
Importantes marcas como SEAT o FORD tienen acuerdos con diversas compañías de seguros.
Así, si financiamos la operación de compra, o una parte, tenemos la posibilidad de contratar un seguro que nos lo venden GRATIS el primer año, o con la posibilidad de sacarlo a todo riesgo con o sin franquicia por muy poco más.
Generalmente, los intereses que cobran este tipo de compañías es del 8%, a lo que siempre hay que unir, la cantidad de 350 – 480 € por el estudio y la apertura del préstamos.
Además del coste del vehículo, la financiera cobra los intereses del préstamos cuyo rango puede variar desde los 24 hasta incluso los 72 meses, la comisión de estudio y cancelación del préstamo parcial o concreto, que varía entre el 0,50 y el 1% siendo generosos.
Y por otra parte, perciben la comisión correspondiente al seguro que han sacado al vehículo cuya pólizas quizás continúe en vigor el futuro reportando comisiones para el concesionario mientras ésta esté en vigor.
Seguros GRATIS durante el primer año, aunque el realidad se trata de una cantidad que entra dentro del montante de la operación.
Cuando hablamos de precio de contado, la diferencia es bastante importante porque el concesionario deja de percibir dinero por las operaciones que hemos comentado.
¿Merece la pena?
Depende de la situación económica que tengamos, el tipo de interés que nos apliquen y los beneficios que obtengamos; cambiar de coche cada ciertos años con un capital mínimo asegurado (multiopción), nuestro trabajo, ya hoy el coche no es un artículo de lujo, lo necesitamos para poder acudir a nuestro empleo, a veces, a grades distancias. Y ya se sabe que un coche viejo necesita de mucho taller.
Hay que estudiar concienzudamente la operación para saber si nos renta, entendiendo que, inevitablemente, siempre va a suponer un gasto para nosotros.
A tener en cuenta que hay operaciones que permiten su cancelación inmediata, por lo que, aunque tengamos que pagar la comisión de estudio y apertura del préstamo y la comisión de cancelación; podemos beneficiarnos de los descuentos en el precio y pagar la totalidad del coche a los dos meses después, ahorrándonos los intereses.
Lo que pasa que muchas veces ocurre lo de siempre, que estos grandes monstruos de la automoción se la saben todas, y te obligan a firmar una cláusula de permanencia por un período determinado de tiempo, puede ser un año, dos, tres o cinco.
¡Cuidado con los matices del contrato y la letra pequeña! De esta forma, si cancelas te aplican una penalización por permanencia que puede ser cuantiosa.